El sentir.

Yo creía, yo pensaba…

…y es que, a veces, sólo hace falta sentir.

Y es que, a veces, ya está inventado.

Me encanta «lo-digital», no lo voy a negar (y además trabajo con ello), pero también me encanta «lo-no-digital» (el papel fotográfico, las maderas y las texturas).

Pensarlo, trabajarlo, mancharlo.

Mimarlo, tocarlo, lijarlo.

Colocarlo, olerlo, mirarlo.

…Sonreír.

Lo bonito hace sonreír ¿no os pasa?, y eso es un sentir.

Y cuando ese sentir se une con imágenes de tu vida, de los tuyos, el sentimiento se magnifica (debe ser parecido a lo que sentían los concursantes de Gran Hermano…).

Y es que, a veces, si lo quieres… ese momento que has decidido mantener vivo para siempre, tu reportaje de fotos lo puedes tener así de bonito, así de sentido. 🙂